Por: Ps. Julio Salas
El abuso sexual es un evento traumático que lleva consigo un sufrimiento oculto que junto con el cómplice del silencio agrava más este malestar, se puede afectar el desarrollo psicológico, sexual y social, aunque esto dependerá de las condiciones internas de la persona y de la ayuda psicológica recibida.
Entre los efectos del abuso sexual podemos mencionar: los recuerdos recurrentes al hecho, pesadillas, sensación de estar sucia, suele haber cambios de conducta comportándose de manera diferente con aislamiento social y sentimientos de culpabilidad. También suelen presentarse depresión, ansiedad, baja estima, hasta intentos de suicidio en casos extremos.
En la sexualidad pueden presentarse problemas en la vida íntima de pareja, aparecen fobias sexuales, a veces la experiencia queda muy gravada en su cuerpo por lo que le es difícil sentir placer ya que asocia su cuerpo con el abuso. Es necesario recibir tratamiento pues los efectos se pueden manifestar al momento o pasados semanas, meses e incluso años.
El rol de la familia es de apoyo emocional hacia la víctima de abuso, brindándole afecto, comprensión y protección. La atención psicológica ayudará a la eliminación de los síntomas perturbadores, para que se asimile la experiencia, liberándose de los recuerdos traumáticos, temores, rencores y emociones dolorosas, utilizando los recursos personales para poder recuperarse psicológica y emocionalmente.
FUENTE: epensa
El abuso sexual es un evento traumático que lleva consigo un sufrimiento oculto que junto con el cómplice del silencio agrava más este malestar, se puede afectar el desarrollo psicológico, sexual y social, aunque esto dependerá de las condiciones internas de la persona y de la ayuda psicológica recibida.
Entre los efectos del abuso sexual podemos mencionar: los recuerdos recurrentes al hecho, pesadillas, sensación de estar sucia, suele haber cambios de conducta comportándose de manera diferente con aislamiento social y sentimientos de culpabilidad. También suelen presentarse depresión, ansiedad, baja estima, hasta intentos de suicidio en casos extremos.
En la sexualidad pueden presentarse problemas en la vida íntima de pareja, aparecen fobias sexuales, a veces la experiencia queda muy gravada en su cuerpo por lo que le es difícil sentir placer ya que asocia su cuerpo con el abuso. Es necesario recibir tratamiento pues los efectos se pueden manifestar al momento o pasados semanas, meses e incluso años.
El rol de la familia es de apoyo emocional hacia la víctima de abuso, brindándole afecto, comprensión y protección. La atención psicológica ayudará a la eliminación de los síntomas perturbadores, para que se asimile la experiencia, liberándose de los recuerdos traumáticos, temores, rencores y emociones dolorosas, utilizando los recursos personales para poder recuperarse psicológica y emocionalmente.
FUENTE: epensa
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